Los Astros

El universo está constituido por muchos astros (objetos celestes) diferentes. En esta sección se mostrarán la mayoría de ellos, (empezando por los que todos conocemos y acabando por los más complejos), y una breve explicación sobre lo que son:

 Estrellas 

Planetas

Satélites

Asteroides

Cometas

Agujeros Negros

Galaxias

Púlsares

Quásares

Estrellas

Las estrellas son cuerpos celestes que son capaces de brillar con luz propia. También podemos definirlas como esferas de plasma que mantienen su forma gracias a un equilibrio hidrostático de fuerzas (producido entre la fuerza de la gravedad y la presión que ejerce el plasma hacia fuera). Las estrellas pueden ser muy variadadas y existen diversos tipos, pero normamlmente suelen ser cuerpos muy grandes y que ejercen un alto campo gravitatorio (motivo por el que muchos otros cuerpos pequeños orbitan alrededor formando sistemas solares).

Las estrellas se forman en nubes estelares densas producidas por supernovas. Los átomos que conforman estos gases empiezan colapsar unos contra otros contrayéndose y generando un calentamiento del gas. El calor poco a poco se incrementará llegando a generarse reacciones importantes entre los átomos (transformación de moléculas de Hidrógeno en Helio). Estas reacciones provocan emanaciones de energía altísimas que le dan a las estrellas la luminosidad característica. Todo esto ocurre hasta un momento en que los átomos llegan a alcanzar un equilibrio a partir del cual dejan de contraerse. El Sol se encuentra en estos momentos en este equilibrio, en el que no existe ningún tipo de contracción por parte de sus componentes.

Las estrellas se pueden clasificar en función de muchas características: el color (nos puede indicar la temperatura que tiene), por la gravitación, por el grado de luminosidad, el tipo de espectro de la luz...

Planetas

Según la Unión Astronómica Internacional, un planeta es todo cuerpo celeste que: orbita alrededor de una estrella, tiene suficiente masa como para poseer un equilibrio hidrostático, y que tiene una dominancia orbital (no hay otros objetos en su orbita). A diferencia de las estrellas, no pueden producir luz propia, sino que la reflejan. También son mucho más pequeños que las estrellas y poseen por tanto una masa y campo graviatatorio menor, pero el suficiente como para atraer a cuerpos menores (satéltites, asteroides...). Actualmente se sabe que los planetas proceden de la formación del Sol (las estrellas): son el resultado del conjunto de fragmentos que se fueron desprendiendo y que más tarde se juntaron y se enfriaron.

Dentro nuestro sistema solar podemos distinguir planetas de dos tipos: planetas rocosos o planetas gaseosos. Los primeros son los planetas más cercanos o interiores. Se caracterizan por ser pequeños y rocosos. Entre ellos distinguimos: Mercurio, Venus, Tierra y Marte. Los segundos son los planetas exteriores o los gigantes gaseosos, llamados así debido a que son mucho más grandes y están constituidos por una superficie de gas. 

No solo existen estos planetas, está estudiado que aproximadamente por cada estrella que hay existen 1,6 planetas orbitando en torno a ella. Existen numerosos planetas extrasolares a nuestro sistema, y alguno de ellos son muy parecidos a la Tierra. 

Encontramos también otros tipos de cuerpos: los planetas enanos. No pueden ser considerados planetas como tal ya que no son lo suficientemente grandes, pero si tienen la suficiente masa como para tener una forma redonda. Plutón es el más famoso de nuestro sistema solar, pero también existen otros como: Ceres, Eris, Makemake...

Satélites

Los satélites naturales son aquellos cuerpos celestes que orbitan alrededor de un planeta. No debemos confundirlos con el término satélites artificiales (que son todas aquellos satélites, naves y estaciones espaciales que hemos enviado nosotros). El ejemplo más claro que podemos tener de un satélite (natural) es la Luna, aunque no todos deben ser como ella. A su vez también existen otros tipos de satélites que pueden girar en torno a otros cuerpos, como por ejemplo a asteroides (en este caso serían satélites asteroidal) o incluso a otros satélites.

Como se ha mencionado antes, no todos los satélites son parecidos a nuestra Luna, muchos de ellos se asemejan mucho más a asteroides de forma irregular (no en forma de esfera). La Tierra solo tiene un único satélite, pero hay otros planetas del sistema solar que tiene más. El planeta Marte posee dos de forma irregular y pequeños: Fobos y Deimos. Por otra parte, Júpiter es el planeta con más satélites del sistema solar: se estiman unos 67, los más importantes son: Europa e Ío. Saturno también tiene una gran cantidad: unos 62 identificados, el más importante es Titán. Urano tiene 27, y el que más destaca es Titania. Neptuno posee 14, con Tritón como el más importante. Incluso el planeta enano Plutón posee un total de 5, con Caronte como el más destacable.

Obviamente existen muchos más satélites en nuestro sistema solar y más aún en nuestra galaxia, pero estos son algunos de lo más importantes que conocemos actualmente.

Asteroides

Los asteroides son cuerpos celestes de menor tamaño que orbitan alrededor de un sistema solar o simplemente vagan por el espacio. Dentro de nuestro sistema solar encontramos principalmente dos conjuntos de asteroides que orbitan al Sol: el cinturón de asteroides (entre Marte y Júpiter) y el cinturón de Kuiper más allá de Neptuno). No debemos confundir el término asteroides con cometas, pues estos cuerpos tienen un distinto comportamiento que se verá más adelante.

Los asteroides tienen formas muy variables, pero se suelen caracterizar por tener un tamaño mucho menor que los planetas y por tener una forma irregular y no esférica, pues no tienen la suficiente masa. Antiguamente se podían definir a los asteroides como pequeños planetoides o satélites, pero actualmente este significado ha caído en desuso. 

El término meteorito hace referencia a un asteroide que ha entrado en la atmósfera de un planeta, y a consecuencia de esto se desintegra.  

Cometas

Los cometas son cuerpos celestes que orbitan a una estrella (como a nuestro sol) y que están constituidos en su mayor parte por hielo, polvo y rocas. El rasgo más característico de los cometas es la estela que van dejando, la cual se puede apreciar perfectamente desde nuestro planeta cada vez que un cometa pasa cerca. Este fenómeno es producido debido a que, conforme el cometa se va acercando a la estrella, el agua congelada (o cualquier otro elemento que posea) se va calentando y se descongela, dejando así una estela de agua líquida que se va desprendiendo del cometa. Cuando se aleja del Sol el agua vuelve a congelarse y deja de tener estela.

Actualmente se cree que los cometas que vemos proceden de más allá del cinturón de Kuiper, por lo que tienen una órbita muy grande y es por eso que no solemos ver cometas. Uno de los cometas más famosos es el cometa Halley, descubierto por Edmund Halley. Es un cometa que orbita alrededor del Sol en un promedio de 76 años y uno de los pocos que se puede ver a simple vista desde la Tierra y que se pueda ver dos veces en una misma vida humana.

Agujeros Negros

Un agujero negro es una región del espacio en donde la concentración de masa es tan elevada que ejerce un campo graviatatorio tan grande que incluso las partículas de luz son atraídas por él. Hoy en día sigue siendo un gran misterio pero hasta la fecha se han realizado algunos descubrimientos importantes sobre ellos.

Actualmente se cree que los agujeros negros se crean a partir de las muertes de algunas estrellas (gigantes rojas). Siguen un proceso denominado colapso gravitatorio, en él: tras varios miles de millones de años de vida, la fuerza gravitatoria de dicha estrella comienza a ejercer fuerza sobre sí misma, originando así una masa concentrada en un pequeño volumen, convirtiéndose en una enana blanca. En este punto, dicho proceso puede proseguir hasta el colapso de dicho astro por la auto atracción gravitatoria que termina por convertir a esta enana blanca en un agujero negro. Este proceso acaba por reunir una fuerza de atracción tan fuerte que atrapa hasta la luz en éste.

No se sabe mucho más acerca del origen. Otros datos interesantes que se conocen es que son capaces de emitir radiación (la radiación Hawking). También se cree que en el centro de la mayoría de las galaxias existe un agujero negro supermasivo (puesto que debe haber un objeto celeste en el centro que produzca un campo gravitatorio enorme). También existen clasificaciones en cuanto a la masa y a sus propiedades físicas.

En conclusión, los agujeros negros siguen siendo un misterio muy dificil de resolver, pero cada vez se están realizando más experimentos. Para aquellas personas que estén preocupados por ellos, quizás le ayude saber que el agujero negor más cercana a nosotros está a muchos años luz de la Tierra, por lo que no hay peligro.

Galaxias

Las galaxias son enormes conjuntos de estrellas, planetas, nebulosas, asteroides y otros cuerpos celestes (incluyendo también a los agujeros negros). Todas las galaxias tienen un incontable número de estrellas, desde las más pequeñas a las más grandes. Se cree que existen más de cien mil millones de galaxias en el universo observable, de distintos tipos y tamaños. Como se ha explicado en un punto anterior, las galaxias pueden ser: elípticas, espirales, lenticulares o irregulares dependiendo de su forma. Nuestra galaxia:  la Vía Láctea , es una galaxia espiral barrada.

Dele al suguiente enlace para volver a la sección sobre Nuestra Galaxia.

Púlsares

Un púlsar es una estrella de neutrones que emite un intenso campo eléctrico. Este campo induce a la emisión de pulsos de radiación electromagnética a intervalos regulares relacionados con el periodo de rotación del objeto. Se caracterizan por girar sobre sí mismos a unas velocidades altísimas: un punto de la superficie de un púlsar puede alcanzar velocidades de 70.000 Km/s. Pueden incluso a expandir su ecuador debido a estas velocidades.

Los púlsares emiten de forma continuada y regular radiación ganma, rayos X y ondas de radio. El descubrimiento del primer púlsar llevo a pensar que se trataba de una inteligencia extraterrestre que emitía ondas de radio. Actualmente se sabe más de ellos pero aún quedan cosas por descubrir.

Se cree que los púlsares se forman cuando, tras la explosión de una estrella, la materia residual se comprime. En este proceso, su gravedad aumenta progresivamente, por lo que disminuyen las distancias que separan los átomos entre sí y los electrones son atraídos desde sus órbitas hacia el núcleo. Estos electrones atraídos hasta el núcleo reaccionan con los protones existentes en él provocando la formación de más neutrones hasta que, finalmente, la estructura atómica desaparece y la estrella se transforma en un "cúmulo de neutrones" muy apretados. Así nace una estrella de neutrones. 

Quásares

Los quásares son objetos celestes de proporciones muy grandes que emiten enormes cantidades de energía electromagnética, luz visible y radiofrecuencias. La luz que emite cada uno equivaldría a un billón de soles.

Los quásares visibles muestran un desplazamiento al rojo muy alto: Este fenómeno es una consecuencia directa de la expansión del universo. Al principio eran llamados agujeros blancos, pero las terías más recientes han descartado este nombre. Suelen estar asociados a los agujeros negros supermasivos de los núcleos de la galaxias, pero se desconoce totalmente el origen.

Todos los quásares que conocemos están muy distanciados de nuestro planeta (el más cercano está a más de 780 millones de años luz). Debido a que la luz tarda tanto en llegar, cuando vemos un quásar (al igual que otros objetos lejanos) estamos viendo un pasado cercano al origen del universo.